Perdemos nuestro tiempo

Vivimos siempre pendiente del pasado de lo que hemos hecho, de lo que pudimos hacer. Cada vez que tomamos una decisión miramos al pasado para saber si lo hicimos antes, cuando nos queremos centrar en algo miramos hacia atrás para ver el pasado de la gente nos fijamos si esa persona hubiera hecho eso o que habría hecho en ese pasado, queremos arrepentirnos de nuestras decisiones y eso no puede ser porque lo único que se consigue es empeorar la situación. Intentamos recordar nuestros tiempos felices para poder volver a vivirlos, pero lo que nunca llegamos a comprender es que la felicidad que vivimos nunca volverá a pasar porque cada vez que seamos felices será de diferentes maneras aunque parezca la misma felicidad siempre habrá algo que la distinga. También pensamos en lo infelices que fuimos y intentamos no elegir esos caminos para que no nos vuelva a pasar pero no es la solución adecuada porque te estas condenando a no intentarlo a no ser feliz porque tal vez en esa decisión estaba la solución.
También vivimos pendientes del futuro, tomamos nuestras decisiones en base a lo que pase luego, y con eso arruinamos todo porque siempre pensamos que seguiremos con la misma vida en el futuro y no, por cualquier mínima cosa todo puede cambiar puede hacer que nuestra vida esté del revés. Intentamos pensar en ¿qué pasará si..? o ¿y si en el futuro..? Todo el mundo tiende a tomar sus decisiones en base al futuro, todo está relacionado con el futuro.
Pero, ¿y que pasa con el presente? Nadie en esta sociedad vive en el presente, no somos capaces de permanecer un solo momento en el presente tenemos que irnos hacia el pasado o hacia el futuro. Puede que nuestro pasado sea importante porque es el que nos ha hecho ser lo que somos y el futuro será en lo que nos convertiremos pero si viviéramos el día a día disfrutaríamos de los pequeños placeremos del mundo esas pequeñas cosas que no somos capaces de ver por estar tan pendientes de lo que hicimos o de lo que haremos. La vida se compone de horas, minutos y segundos si no los aprovechamos al máximo no seremos capaces de ser felices al cien por cien y la vida consiste en eso, en la plena felicidad.